Encarna tenia este baúl que pertenecía a su familia y lo trajo al taller para adecentarlo.
Aunque no estaba en muy malas condiciones los barnices estaban muy oxidados, los herrajes sucios y en una de las patas el soporte estaba quebrado.
En esta primera foto podéis apreciar la diferencia entre la parte izquierda ya retirado el barniz y la derecha que aun lo conserva,
Una vez limpio le dimos tratamiento anticarcoma, reparamos las patas rotas , limpiamos los herrajes, volvimos a barnizar y forramos el interior con una tela adamascada.
El resultado hace que se aprecie mucho mas la veta de la madera y al forrar el interior tenemos una pieza útil y cómoda para seguir utilizando muchos años mas.
Tras un tiempo en pausa espero volver a retomar el blog y seguir mostrando los trabajos que he han salido del taller con mas constancia y frecuencia.